sábado, 7 de octubre de 2000

Bombas-lapa contra militares en Andalucía


Especialistas en explosivos hacen estallar hacia las tres de la tarde en Chipiona (Cádiz) un artefacto colocado en el interior del vehículo "Renault 21" del brigada del Ejército de Tierra José María Velázquez Vázquez, de 44 años. El artefacto se supone había sido colocado en el transcurso de la noche tras forzar la puerta del copiloto del vehículo, aparcado en las cercanías del domicilio del brigada en la zona del Tiro de Línea (Sevilla). El militar recorrió más de 120 kilómetros con la bomba debajo del asiento, que falló en su sistema de encendido, y se dio cuenta al llegar a su destino de la existencia del paquete, que abrió parcialmente. La fiambrera donde estaba el explosivo llevaba grabado el nombre de Urko. La explosión destruyó el coche y causó daños en algunas viviendas. 
Los autores de la colocación fueron Igor Solana y Harriet Iragi Gurrutxaga, miembros del "comando Erraia", por lo que fueron condenados a 15 años de prisión. 

.- La policía hace estallar por la noche mediante una voladura controlada un artefacto explosivo colocado en el interior del vehículo propiedad del teniente del Ejército de Tierra Ángel González Calvente, de 49 años, en la explanada de un cuartel de Intendencia en las afueras de Sevilla. El artefacto fue encontrado cuando el militar llevó a reparar la cerradura forzada. La bomba fue colocada dos días antes, mientras el coche estuvo aparcado en el barrio del Tiro de Línea pero no estalló debido a un fallo técnico. Este militar es vecino del anterior. Se supone en este artefacto iba escrito el nombre de Ekain o Ekaitz. Debido a esta acción, el militar sufrió después un fuerte deterioro psíquico y físico. Los etarras Solana e Iragi fueron condenados por este suceso a 15 años de cárcel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario