Se comunica el traslado desde Soria de Igor González Sola, tras cumplir tres cuartas partes de la condena de veinte años, a la prisión de Martutene en San Sebastián debido sus circunstancias personales (dos intentos de suicidio). Según algunas fuentes discrepaba de la línea oficial de los colectivos de apoyo a los presos, por lo cual ya no formaba parte de Etxerat (no figuraba en sus listas) y tampoco formaba parte del Colectivo oficial de presos vascos (EPPK).
También se traslada a José Luis Barrios (condenado por el asesinato de Alberto Jiménez-Becerril y su mujer Ascensión García Ortiz) de la cárcel de Granada a la de Zuera (Zaragoza) tras flexibilizarle el primer grado con la aplicación del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario.
Tras el anuncio, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) pidió una reunión urgente con Fernando Grande-Marlaska, ante el «desamparo» que les produce que ya sean 43 los etarras trasladados (más del 20% de los que siguen en prisión) desde junio de 2018, con Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
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