Dos detenidos y atentado frustrado

Dos etarras roban a punta de pistola un "Opel Kadett" en Galdácano (Vizcaya) y atan a su propietario a un árbol. A continuación se dirigen a Basauri junto a otros dos activistas que llevan un "Ford Fiesta" cargado de explosivos robado el día anterior en Eibar. La intención según parece era hacer estallar este segundo vehículo al paso de una patrulla de la Guardia Civil, que ese día cambió su itinerario. Poco después, agentes del Cuerpo Nacional de Policía localizan el primer vehículo y detienen a sus dos ocupantes: Guillermo Merino Bilbao, 27 años, y Jon Urretabizkaia Sauquillo, de 26. Tras estas detenciones se encontró un piso con armamento y material explosivo.

El día 12 de enero fue localizado abandonado el "Ford Fiesta" en el municipio vizcaíno de Ochandio; en su interior se encontraron explosivos, un arma y material electrónico.

En este atentado frustrado intervino también Francisco Rementería.

Merino fue condenado a casi 50 años de cárcel en febrero de 2003, mientras que su compañero a casi 41 años. Además fueron condenados: Oier Andueza (casi 41 años, detenido el 22 de febrero tras presentarse voluntariamente), Julen Uriarte Iturriaga e Izaro López Bidaguren (casi 7 años de prisión el primero y cinco el segundo, detenidos al día siguiente que Merino y Urretabizkaia), Francisco Javier Cano Arce (5 años, detenido el 5 de enero en Bilbao), José Ramón Arenaza (5 años de prisión, detenido el 10 de febrero en Durango), Jorge Macarrón Fuertes (5 años, detenido el 22 de febrero tras presentarse voluntariamente) y Gotzón Beloki Ortuza (casi siete años de prisión, detenido el 9 de febrero en Madrid-Barajas cuando iba a tomar un avión con destino a México).

Cano fue puesto en libertad el 6 de abril de 2003. García Gaztelu fue condenado a 8 años de prisión por dar armas y explosivos al grupo.